Cuando te fuistes.

Todo parece indicar que hoy te alejas
tu perfume se ha ido en la oscuridad
con un beso terminaste nuestra historia
y lo nuestro se ha ido con la eternidad.

Sonrió, no quiero que me veas llorar
la despedida se hace absurda y vacía
y aunque quisiera abrazarte por un momento, 
cierro la puerta de mi corazón y dejo que te vayas,
ya que este corazón se llena de soledad.

Mi cuerpo no respondía, cerraste la puerta
y con ella, apenas tus recuerdos parecen asomar
porque si lo de nosotros fue amor, entonces:
¡En el resto de mis días jamás volveré a amar!